Sé que estarán pasando muchas cosas por su cabeza ahora.
Una de ellas puede ser ¡QUÉ DIFÍCIL ES HABLAR EL ESPAÑOL!
Seguro se encontrarán con expresiones, palabras que nunca escucharon o que oyeron en otros contextos.
El video a continuación es una muestra de lo dispuestos que estamos los hispanoamericanos a reírnos de nosotros mismos.
La canción es una muestra fiel de los cambios en el slang de cada país (y de las confusiones que esto puede traer), pero les puedo asegurar: ¡TODOS LOS QUE HABLAMOS ESPAÑOL NOS ENTENDEMOS!
¡Espero que no se den por vencidos y sean parte de esta gran comunidad!
¡Ahí va!
¡Qué difícil es hablar el español!
Yo viaje por distinto países,
conocí las más lindas mujeres,
yo probé deliciosa comida,
yo bailé ritmos muy diferentes.
Desde México fui a Patagonia,
y en España unos años viví,
me esforcé por hablar el idioma,
pero yo nunca lo conseguí…
¡Qué difícil es hablar el español!
porque todo lo que dices tiene otra definición.
¡Que difícil entender el español!
si lo aprendes, ¡no te muevas de región!
¡Que difícil es hablar el español!
porque todo lo que dices tiene otra definición.
¡Que difícil es hablar el español!
Yo ya me doy por vencido para mi país me voy.
Yo estudiaba el castellano cuando hacia la secundaria,
de excursión de promoción nos fuimos para las Islas Canarias.
En el viaje comprendí que de español no sabía nada,
y decidí estudiar filología hispana en Salamanca.
Terminada la carrera yo viajé a Ciudad de México,
sentía que necesitaba enriquecer mi léxico.
Muy pronto vi que con el español tenía una tara,
y decidí estudiar otros tres años
en Guadalajara.
Cuatro meses en Bolivia,
un post grado en Costa Rica,
y unos cursos de lectura con un profesor de Cuba.
Tanto estudio y tanto esfuerzo, y al final tu ya lo ves:
ESTE IDIOMA NO SE ENTIENDE
NI AL DERECHO NI AL REVÉS!
¡Qué difícil es hablar el español!
porque todo lo que dices tiene otra definición.
¡Qué difícil es hablar el español!
yo ya me doy por vencido para mi país me voy.
En Venezuela compré con mi plata una camisa de pana,
Y mis amigos me decían ‘Ese es mi pana, ese es mi pana!’
Y en Colombia el porro es un ritmo alegre que se canta,
pero todos me miran mal cuando yo digo que me encanta.
Los chilenos dicen cuando hay algo lejos “que está a la chucha”,
y en Colombia el mal olor de las axilas “es la chucha”,
mientras tanto en Uruguay a ese olor le dicen ‘chivo’,
y el diccionario define al chivo como a una ‘cabra con barbuchas’.
Y cambiando una vocal la palabra queda “chucho”,
y “chucho” es un perrito en Salvador y Guatemala.
Y en Honduras es tacaño, y a Jesús le dicen Chucho,
con tantas definiciones, ¡¿cómo se usa esa puta palabra?!
Chucho es frío en Argentina,
Chucho en Chile es una cárcel,
Chucho en México si hay alguien,
con el don de ser muy hábil.
El chucho de Chucho es un chucho ladrando,
y por chucho a Chucho lo echaron al chucho,
el Chucho era frío y lo agarró un chucho
-“Que chucho”- decía,
-“extraño a mi chucho”.
¡Qué difícil es hablar el español!
porque todo lo que dices tiene otra definición.
¡Qué difícil entender el español!
yo ya me doy por vencido para mi país me voy.
Comencé por aprender los nombres de los alimentos,
pero fríjol es ‘poroto’ y ‘habichuela’ al mismo tiempo.
Y aunque estaba confundido con lo que comía en la mesa,
de algo yo estaba seguro,
un ‘strawberry‘ es una fresa.
Y que sorpresa cuando en México a mi me dijeron ‘fresa’
por tener ropa de Armani y pedir un buen vino en la mesa.
Con la misma ropa me dijeron ‘cheto’ en Argentina.
-“Cheto es fresa yo pensé”-, y pregunté en el mercado en la esquina:
-“Aquí están buenas las chetas?”-, y la cajera se enojó.
-“Andate a la re (peep) que te remil parió!”
Y -“Fresas, parce”- me dijo un colombiano mientras
vió que yo mareado me sentaba en una silla.
-“Hermanito no sea bruto, y apúntese en la mano:
En Buenos Aires a la fresa le dicen frutilla”.
Ya yo me cansé de pasar por idiota
digo lo que a mí me enseñan y nadie entiende ni jota
y si “ni jota” no se entiende pues pregunte en Bogotá.
Yo me rindo, me abro,
me voy pa’ Canadá!
Un ‘pastel’ es un ‘ponqué’, y un ‘ponqué’ es una ‘torta’
y una ‘torta’ ¡el puñetazo que me dio una española en la boca!
Ella se veía muy linda caminando por la playa
Yo quería decirle algún piropo para conquistarla.
Me acerqué y le dije lo primero que se me ocurrió,
Se volteó, me gritó, me escupió y ¡me cacheteó!
-‘Capullo’- yo le dije, porque estaba muy bonita.
y si capullo es un insulto, ¡quién me explica la maldita cancioncita?
(lindo capullo de alelí, si tu supieras mi dolor,
correspondieras a mi amor, y calmaras mi sufri fri fri fri)
Sufrimiento es lo que yo tengo,
y por más que yo me esfuerzo yo a ti nunca te comprendo.
Ya no sé lo que hay que hacer,
para hacerse entender,
y la plata de mis clases no quisieron devolver.
Que difícil es hablar el español,
porque todo lo que dices tiene otra definición.
Que difícil entender el español,
Yo ya me doy por vencido para mi planeta me voy.
En España al lìquido que suelta la carne la gente le dice ‘jugo’,
Por otro lado en España al jugo de frutas la gente le dice ‘zumo’.
Me dijeron también que el sumo pontífice manda en la religión,
y yo siempre creí que un sumo era en gordo en tanga peleando en Japón.
Conocí a una andaluza, se llamaba Concepción
Su marido le decía “Concha de mi corazón”.
-“Vámonos para Argentina, le dije en una ocasión”.
-“Yo lo siento pero si me dices ‘concha’ creo que allá mejor no voy.”
-“Pero Concha que te pasa, si es un muy lindo país,
hay incluso el que compara Buenos Aires con Paris.”
-“De mi apodo allá se burlan de la forma más mugrienta
y siempre hay cada pervertido que de paso se calienta”.
Y con tantos anglicismos todo es más complicado
si traduces textualmente no tienen significado:
-“I will call you back”-,
te diría cualquier gringo,
-“Yo te llamo pa trá”-,
te dicen en Puelto Lico!
Y ‘ojos’ es ‘eyes’, ‘ice’ es ‘hielo’, ‘yellow’ el color de la yema del huevo!
‘Oso’ es ‘bear’, y ‘ver’ es ‘see’,
‘Si’ es una nota que en inglés es ‘B’…
Y aparte ‘B’ es una ‘abeja’ y también es ‘ser’,
y ‘Sir’ Michael le decía a mi profe de inglés.
Y el que cuida tu edificio es un ‘guachiman,’
y con los chicos de tu barrio sales a ‘hanguear’.
Y la glorieta es un ‘romboy’,
y te vistes con ‘overol’.
¡¿Porqué tiene que ser tan difícil saber como diablos hablar español?!
No es que no quiera, perdí la paciencia
¡la ciencia de este idioma no me entra en la consciencia!
yo creía que cargando un diccionario en mi mochila,
y anotando en un diario todas las palabras que durante el día aprendía,y leyendo, viajando, charlando, estudiando
y haciendo amigos en cada esquina
y probando todo tipo de comida y comprando enciclopedias y antologías,
YO PENSE QUE APRENDERÍA
Y QUE CON FE LO LOGRARÍA
¡¡¡MIS ESFUERZOS FUERON EN VANO!!!!
Yo creía que hablaría el castellano pero YA NO (no no no no)…
Que difícil es hablar el español,
porque todo lo que dices tiene otra definición
“En Chile polla es una apuesta colectiva, en cambio en España es el pene. Alguna gente en México al pene le dice pitillo, y pitillo en España es un cigarrillo y en Venezuela un cilindro de plástico para tomar las bebidas. El mismo cilindro en Bolivia se conoce como pajita, pero pajita en algunos países significa masturbacioncita, y masturbación en México puede decirse chaqueta, que a la vez es una especie de abrigo en Colombia, país en el que a propósito una gorra con visera es una cachucha, cuando cachucha en Argentina es una vagina, pero allá a la Vagina también le dicen Concha, y Conchudo en Colombia es alguien descarado o alguien fresco, y un fresco en Cuba es un irrespetuoso! YA ESTOY MAMADO!”
-¿Pero ‘mamado’ de qué?
¿Mamado de borracho?
¿Mamado de chupeteado?
¿Mamado de harto?
…This is exhausting…
¡¡¡Yo ya me doy por vencido,
Para mi país me voy!!!